Luis Rodríguez Padial, presidente de la SEC: “Los profesionales sanitarios son esenciales para el cambio hacia la ASBV, y están dispuestos a mejorar, pero necesitan herramientas”

En el reciente webinar “Cómo involucrar a los profesionales en la transición hacia un nuevo modelo de Asistencia Sanitaria Basada en Valor”, organizado por Think & Act for Value, el presidente de la Sociedad Española de Cardiología, el Dr. Luis Rodríguez Padial, compartió su visión sobre cómo implementar entre los profesionales sanitarios españoles el modelo de la Asistencia Sanitaria Basada en Valor (ASBV) y abogó por un enfoque de colaboración y uso de herramientas tecnológicas que optimicen la experiencia de pacientes y profesionales.

¿En que punto se encuentra la implementación de la ASBV en España?

La ASBV es un concepto del que llevamos hablando desde hace tiempo, pero aún no está implantado de forma generalizada en nuestro país. Actualmente, medimos mucha actividad, pero no evaluamos suficientemente los resultados que realmente importan a los pacientes. Hay un gran potencial en medir la percepción de los pacientes sobre los resultados, a través de herramientas como PREM (Patient-Reported Experience Measures) y PROM (Patient-Reported Outcome Measures), y en España todavía tenemos camino por recorrer en este aspecto.

¿Qué es «el valor» en la atención sanitaria desde su perspectiva?

El valor, desde el punto de vista de la ASBV, es ofrecer lo que realmente importa al paciente. No se trata solo de proporcionar la mejor calidad técnica, sino de entender y medir los aspectos que afectan a la vida y el bienestar del paciente. En la Sociedad Española de Cardiología, por ejemplo, trabajamos en desarrollar estrategias que permitan a los profesionales aplicar esta visión en su práctica clínica.

¿Qué rol juegan los profesionales en la implementación de la ASBV?

Los profesionales sanitarios son esenciales para el cambio hacia la ASBV, y están dispuestos a mejorar, pero necesitan herramientas que les permitan medir no solo la actividad, sino los resultados. Contar con el apoyo y la implicación activa de los profesionales en el diseño y en la medición del impacto de estas prácticas es fundamental. Desde la Sociedad Española de Cardiología, llevamos años trabajando en el programa RECALCAR, que ayuda a los servicios de cardiología a medir y comparar sus resultados con otras comunidades autónomas, motivando así la mejora continua.

«Contar con el apoyo y la implicación activa de los profesionales en el diseño y en la medición del impacto de estas prácticas es fundamental”

¿Qué papel tienen las sociedades científicas en este cambio? 

Las sociedades científicas desempeñan una doble función clave en la adopción de la ASBV: por un lado, como formadoras de los profesionales sanitarios, y, por otro, como eje de unión entre clínicos y directivos, facilitando una colaboración alineada hacia la mejora de la calidad asistencial.

En la Sociedad Española de Cardiología, recientemente hemos creado un grupo de gestión con el objetivo de compartir conocimientos y experiencias que puedan ser útiles para otros miembros. También es importante que las generaciones más jóvenes de profesionales valoren la importancia de esta transformación y se impliquen en proyectos de mejora.

¿Qué liderazgos son necesarios para promover la ASBV?

Las iniciativas que solo vienen de la gerencia tienen impacto limitado a medio y largo plazo. Las transformaciones más eficaces suelen surgir de grupos de profesionales que creen en la ASBV y pueden liderar el cambio desde el propio equipo, convenciendo a sus compañeros y a los pacientes de los beneficios de este modelo. Este liderazgo clínico, si se refuerza con el apoyo de la dirección, puede generar acciones transformadoras y contribuir a un cambio duradero.

“La ASBV podría ser un antídoto contra el burnout”

¿Cuáles son los beneficios de la ASBV para los profesionales sanitarios?

Cuando un profesional puede ver y analizar el impacto de su trabajo en la salud de sus pacientes, se siente más motivado y satisfecho. La ASBV refuerza el papel del profesional como protagonista en la atención y les permite gestionar sus casos de forma continuada y con resultados medibles. Creo que la ASBV podría ser un antídoto contra el burnout, ya que el profesional siente que su esfuerzo se traduce en un impacto real y positivo en la vida de las personas.

¿Cómo puede ayudar la tecnología a implementar la ASBV?

La tecnología es una aliada fundamental en este proceso. Herramientas como la historia clínica electrónica (HCE) permiten integrar mejor los distintos niveles asistenciales. Sin embargo, a menudo estas herramientas no están diseñadas de forma óptima para los profesionales, y terminan consumiendo demasiado tiempo. La inteligencia artificial puede ser muy útil para automatizar tareas administrativas y reducir las listas de espera, además de mejorar la coordinación entre atención primaria y especializada.

La falta de integración entre niveles asistenciales deja muchas veces al paciente en un “limbo asistencial”

¿Cómo se puede reducir la carga administrativa de los clínicos para que se centren en su labor? 

Una de las quejas habituales de los clínicos es el tiempo que consume la gestión administrativa en la consulta, especialmente en atención primaria, donde a menudo deben dedicar alrededor de un 30% de su tiempo a tareas burocráticas, como recetas o bajas. La inteligencia artificial puede ayudar a automatizar estas gestiones y liberar tiempo para que el profesional se centre en la atención directa al paciente. También es clave que las herramientas tecnológicas sean más ágiles y ofrezcan una experiencia de uso amigable.

¿Qué retos hay en la relación entre atención primaria y especializada en la ASBV?

La falta de integración entre estos niveles asistenciales deja muchas veces al paciente en un “limbo asistencial”, sin un seguimiento adecuado. Las herramientas digitales pueden resolver esto al permitir, por ejemplo, que el médico de atención primaria esté en comunicación constante con los especialistas. Esta coordinación entre niveles es clave para que el paciente reciba atención continua y que los profesionales puedan colaborar de manera más eficaz.